martes, marzo 23, 2010

Prominencia y reactivación solar


En ocasiones pueden verse prominencias espectaculares surgiendo más allá del borde del Sol (clic en la imagen para ampliarla a 900 x 549 píxeles o verla mucho más grande). Uno de esos casos ocurrió la semana pasada, cuando una protuberancia gigante, visible en el lado derecho de la fotografía de hoy, confirmó que la actividad del Sol se incrementaba, dando término a un mínimo solar excepcionalmente tranquilo.

En la imagen se observa una alfombra cambiante de gas caliente en la cromosfera del Sol, obtenida en un color muy específico de luz emitida por el hidrógeno. Una prominencia o protuberancia solar es una nube de gas solar suspendida justo por encima de la superficie de la estrella debido a la acción de un campo magnético solar. La Tierra habría cabido cómodamente debajo de la prominencia mostrada en la imagen. Aunque son muy calientes, por lo general las prominencias aparecen de color oscuro cuando se ven contra el Sol, por cuanto son ligeramente más frías que la superficie del astro.

Una prominencia quiescente dura aproximadamente un mes y en una Expulsión de Masa Coronal (CME por las siglas de Coronal Mass Ejection) puede arrojar gas caliente al Sistema Solar. Al día siguiente la misma prominencia tenía un aspecto levemente diferente.

Una eyección de masa coronal captada por el Observatorio Solar SOHO en 2002. En la imagen se distinguen varios filamentos en erupción que se alejan de la superficie activa del sol, lanzando enormes burbujas de plasma magnético al espacio. La luz directa del Sol está bloqueada en la parte de la imagen que corresponde al disco solar y fue reemplazada por una imagen simultánea del Sol en luz ultravioleta. El campo visual se extiende por más de 2 millones de kilómetros desde la superficie solar. Si bien el descubrimiento de las claves de estos acontecimientos explosivos, llamados Eyecciones de Masa Coronal (CME), comienza con los satélites espaciales de los años 70, la imagen espectacular mostrada arriba forma parte de un registro detallado realizado por el Observatorio Solar SOHO, actualmente en servicio, del desarrollo de esta CME. Las CMEs se producen alrededor de una vez por semana en las cercanías del mínimo del ciclo de actividad solar, pero la tasa usual es de dos CMEs o más al día en las proximidades del máximo solar. Las CMEs más potentes pueden influir profundamente sobre el clima espacial y las que se dirigen hacia nuestro planeta pueden ocasionar serios problemas (clic en la imagen para ampliarla). Más información (en inglés).

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 23 de marzo de 2010. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito y copyright: Alan Friedman (Averted Imagination).